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lunes, 18 de junio de 2012

Acción 12 (III)

Cuaderno IX, Diagrama de Temor. 
Omar SM

Diagrama de Temor, Cuaderno IX. pág. 85-86, sep 2011- enero 2012 


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sábado, 16 de junio de 2012

Acción 12 ( II )



   Diagrama de Temor

A] Con el temor comienza el Existencialismo. El temor es una pulsación.   
     No es una enfermedad pero sí es un síntoma existencial.

B] La existencia delata a su vez una zona de afirmación, simultáneamente es una
     zona desde donde la extinción se vuelve consciente. 

C] Esta zona en sí misma no se puede restringir, todo lo contrario, se derrama.
     Agresivamente se derrama. La afirmación no puede ser parcial, no es
     negociable. 

D] Dominar el temor no es agotar el temor, tampoco extinguirlo. El domino de sí
     mismo en el temor es existir con él, pese a él, en él.

E] Es temor, ni miedo ni terror. Es una ética, no una moral. Es un general, no un
     particular. Un miedo es un temor objetivado.
     Si le tengo miedo a la oscuridad en ese momento estoy entrando a la moral de
     la oscuridad. El miedo es un espacio oscuro por ser cerrado, fuera de él esta el
     temor y en este sentido poco importa saber si fuera hay luz.

F] Dominar el temor podría implicar infundir temor. El dominio del mecanismo  
    temor, genera el miedo como producción, una maquinaria. El resultado es una
    moral que se establece, una máquina de ser. Una máquina que controla la
    subjetividad.

G] El miedo es la máquina ideológica, una herida que pretende adherirnos a ella 
     por herencia.

I] El temor actúa como pathos afirmativo. Fuera de una moral éste existe como un
   mecanismo que produce subjetividad.

J] En toda subjetividad subyace una brújula hechizada de sí, un Ser.

L] Establecer un diálogo sobre el temor por medio del diagrama es establecer mal
    el argumento. En este caso el diagrama es un mecanismo que sucede porque
    existe un pathos de temor. El diagrama sucede simultáneamente, no es algo 
    previo, es algo que esta siendo.   

ionante si  
     el diagrama es subjetivado como una pasión.

Q] De lo contrario es una negatividad existencial, es decir, una extinción si el 
     diagrama se establece como una lógica y no cono una subjetividad.

R] Pensar el temor no puede ser y no será lo mismo que sentir el temor.
     Allí donde diagrama y temor condensan su zona de ser e imposibilitan todo acto
     de creación, la subjetividad actúa como surtidor de posibilidades. 
Omar SM


martes, 12 de junio de 2012

Acción 12 ( I )

Cuaderno IX, Diagrama de Temor. 
Omar SM



Cuaderno IX, Diagrama de Temor

Hay un acto, ese acto tiene que ver con un registro sucedáneo al dibujo, a la lectura, la escritura, al transitar, a un espacio y a un tiempo de acción, a la acción misma del registro. Más lejano a una acción de fidelidad pasional frente a lo que se registra, de registrar para preservar la herencia o la ruta histórica de alguna ideología, en este caso el acto del registro tiene que ver con la subjetividad como motor. 

El registro y su soporte para accionarse se anclan fuera de ese tiempo en el que los actos transcurren, existen en contra de la extinción de su objeto de ser, más aún, existen porque su objeto detonante no existe más. Se conservan fuera del tiempo hasta que alguien los vuelve a integrar en él, en ese transcurrir son modificados, su objeto de ser se desentraña porque subyace pero nunca es el mismo. La percepción distorsionada que surge en ese objeto subyacente, como una especie de subjetividad transitoria, se hace presente porque no hay una regla de oro en la interpretación, no es arqueología. El registro y su soporte no sólo son atributos del pasado ya distante o adyacente, sino posibilidad real de existencia en esa realidad que una vez interpretada se ha polarizado como posibilidad. Cuando el registro se consulta se integra al tiempo que transcurre, ese tiempo que se habita con la subjetividad porque es un territorio existencial. 

Hay una acción prolongada en la que registro, ese registro que he planteado tuvo una duración de 5 meses, entre septiembre del 2011 y enero del 2012. Ese registro deviene en el formato de un cuaderno-bitácora. No es un acto de registrar para llenar las páginas de un cuaderno, es más una ética de trabajo, un poética. El cuaderno-bitácora que retomo es el número nueve, hasta el momento hay ocho cuadernos previos y tres posteriores. Lo particular del cuaderno número nueve es que mientras en el resto de los cuadernos que he trabajado hay una pronunciación por intereses mixtos, dibujos e ideas que me seducen, en él, el eje temático, pese a varias interferencias, estuvo concentrado en tres pensamientos: la subjetividad, el temor y el diagrama. De suerte que a esta acción de registro-dibujo-lectura-escritura la he llamado Cuaderno IX, Diagrama de Temor.

Omar SM